sábado, 23 de noviembre de 2013

La amistad...



Qué fácil es hacer amigos cuando somos niños. Qué sencillo es eso de la amistad. No hace falta hablar, no hay peleas, no hay problemas. Invitaciones para todos en los cumpleaños, juegos en las horas del recreo. Es la amistad más sincera, la amistad de verdad. Confías en tus amigos, les dices las cosas que no te gustan, les defiendes y les quieres. Los amigos de la infancia nos enseñan cómo es la verdadera amistad.




Sin embargo, como pasa con todo, cuando crecemos esto cambia. Las cosas se complican. Y no hablo de los amigos en particular, lo que cambia es la amistad. Ya no nos sirve con juntarnos a las tardes un rato para jugar porque ya nos hemos hecho mayores y, la amistad, como todo lo que tiene personas de por medio, hay que cuidarla. Hay que cuidarla mucho. 

Los amigos son un regalo. Los amigos son esas personas que están ahí siempre, llueva, nieve o granice. Personas que se preocupan por ti, que te hablan, que te llaman. Personas que se ríen con tus alegrías y que lloran con tus penas. Personas que te sostienen cuando todo se derrumba. Lo que a mí más me asombra de la amistad es que cuando todo va mal, cuando las cosas se tuercen, cuando parece que no hay salida, es cuando más brilla, cuando más grande se hace. 

Con el paso de los años mis amigos han ido cambiando. Nuevas personas han ido entrando a mi vida, demostrándome que están ahí para lo que necesite. Pero también hay otras que han ido saliendo. No por nada en particular, sino porque todos crecemos, tomamos diferentes direcciones y si las cosas no se cuidan viene el distanciamiento. 



Así que de esto va mi consejo de hoy, de la amistad. Porque no cuesta nada cuidar a los amigos, guardarles un momento del día, preguntarles a ver qué tal están, sacarles una sonrisa. Intenta hacerlo hoy, dedícales un instante de tu día, aunque no sea muy largo. Los amigos puede que no estén ahí para siempre, eso solo depende de ti. 

Finalmente, para terminar, quiero aprovechar esta entrada de hoy para hacer algo que ya debería haber hecho, para agradecerles a mis amigos que siempre estén ahí, que me escuchen, que se preocupen por mí, que me animen a que siga adelante con el blog y que sean los primeros en leer todas y cada una de mis entradas publicadas. Gracias, de verdad.

4 comentarios:

  1. De nada!!!! Ya era hora que nos agradecieses la fidelidad eeehhh!!!

    Jajajjajjajaja ya sabes que ES BROMA.

    Es un placer leerte y mas una enteada como la de hoy, en la que haces a cada uno identificarse y reflexionar sobre su pasado y su presente.
    Y sobre todo GRACIAS POR SER AMIGA! :)

    ResponderEliminar
  2. Estos temas siempre me recuerdan a la historia del tren.

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias Maite. Muchas gracias por leerme cada entrada, por aconsejarme, por animarme a seguir escribiendo y muchas gracias por estos comentarios. Con amigas así da gusto.

    ResponderEliminar
  4. Una vez más haces que con cada entrada nos sintamos identificados.
    La amistad es algo que hay que ir puliendo día a día, interesarse por los que te rodean y mostrarte cerca de ellos en todos los momentos, buenos y malos.
    Ese mundo de inocencia y fantasía pasa a ser un mundo de nuevas experiencias, de elecciones importantes que van a construir nuestro futuro próximo, elección de las personas que estarán en él.
    Qué importante es la amistad.

    PD: me encanta la foto de F R I E N D S!
    (qué gran serie y la cantidad de situaciones que viven esos seis inseparables amigos pese a sus contratiempos)
    =)

    ResponderEliminar