miércoles, 2 de septiembre de 2015

Pequeños caprichos

Mi abuela siempre tiene flores en casa y me encanta. Es una tontería, no cuesta nada poner un jarrón en una esquina, pero es un bonito detalle.

Uno de los ramos de flores de mi abuela

Me encantan las flores, pero nunca tengo en casa. Y es que por mucho que lo repito, una y otra vez, a nadie se la ha ocurrido todavía regalarme. Este verano he aprovechado algún día que me pillaba cerca del campo para coger flores bonitas y hacer un ramo, pero la realidad a veces no se parece mucho a lo que imaginamos, y al final he acabado con cuatro flores llenas de mosquitos.

Comprar pequeños ramos en alguna floristería todavía no entra dentro de mis posibilidades. Estar con la carrera recién acabada no da para mucho… Pero creo que de aquí a unos años comprar flores será uno de mis caprichos. Supongo que tendré que recordármelo, porque las flores hay que regarlas, necesitan sol, conllevan trabajo…

En realidad sé que no aportan demasiado. Sólo pequeños detalles, un poco de color, un rincón bonito… Pero dicen que los pequeños detalles son los que marcan la diferencia y a mí una casa con flores siempre me transmite buenas sensaciones.


Vía pinterest

Y para vosotros, ¿cuáles son vuestros pequeños caprichos?


4 comentarios:

  1. Una onza de chocolate después de unos días de comida sana ��

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  2. A mi me encanta echar un poco de chocolate al café de vez en cuando! ����

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  3. conectar los auriculares y olvidarse del mundo

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  4. helado en una calurosa tarde de verano con la mejor compañía

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