jueves, 24 de diciembre de 2015

Un poco de Navidad



¡Ya vuelvo, ya vuelvo! Yo no quería desaparecer tanto tiempo, de verdad, pero diciembre se ha ido complicando y no he podido sacar ni un minuto para escribir algo. A veces pasa que las cosas no vienen como una se las espera y toca improvisar un poco. Pero bueno, aquí estoy de nuevo para deciros que sigo viva y para contaros cosas, que se me van acumulando. Creo que el post de hoy va a ser un poco popurrí, pero tengo que soltar todo de golpe, ya me perdonaréis.

Empiezo diciendo que ¡ya tenemos aquí la Navidad! Este año viene un poco diferente. Mi abuelo está en el hospital y, aunque ya va para delante, va a tener que pasar las fiestas ahí, cosa que nos va a hacer pasarlas a los demás también. Ayer ya tuvimos que aceptarlo, que de momento no nos movemos, así que decidimos ambientar un poquillo la situación. A fin de cuentas es Navidad en todos lados y no podíamos dejar que al abuelo se le olvidara, así que encendimos la tele, pusimos la lotería y adornamos su habitación, aquí os dejo una foto.




Bueno la habitación del hospital la hemos adornado un poco, pero mi casa no tiene signo alguno de que la Navidad se acerca (y eso que nosotros siempre ponemos belén, árbol y espumillón por todos lados). Así que yo todavía ando mentalizándome de que ya llegan las fiestas y hoy, por fin, es Nochebuena.

Una de las cosas más típicas de la Navidad, de las que sí que he disfrutado durante estos días, han sido los reencuentros. Cada vez son más las personas que se van a vivir fuera y por eso las temporadas de estar en casa hay que aprovecharlas. Los abrazos con una persona a quien llevas tiempo sin ver son una de las cosas más bonitas que hay, sin duda.

Otra de las razones por las que he estado más desaparecida este mes han sido mis exámenes de enero. Parece que las Navidades son largas pero, entre una cosa y otra, se quedan en nada. Yo ya no sé cómo me va a dar tiempo de estudiar todo lo que tengo para entonces. Y así me encuentro con que tengo que comprar un regalo del amigo invisible y todavía no tengo nada de nada. Ni tengo nada, ni tengo ideas, ni tengo tiempo. Por eso y por si alguno os encontráis también en esta situación aquí os dejo una lista con 23 regalos para tu amiga invisible por menos de veinte euros.

La verdad es que hacerme regalos a mí es muy fácil. Hay muchas cosas que me gustan pero si quieres acertar seguro, regálame un libro. Voy haciéndome listas con los que más me gustan, esos que me quiero leer, sí o sí. De momento este encabeza la lista, ya había oído buenos comentarios sobre él pero tras leer esta crítica no dudé en añadirlo. Si queréis regalar libros pero no se os ocurren cuáles, aquí os dejo unas cuantas ideas para esta Navidad.





Cambiando totalmente de tema. Este mes he retomado los juegos de mesa. Hacía mucho que se me había olvidado lo bien que se pasa una noche, alrededor de una mesa, jugando con amigos. Desde hace ya tiempo las noches frías de invierno, esas que apetece pasarlas en casa, las dedicábamos a cenar y ver pelis, pero este mes he vuelto a los juegos de mesa y, verdaderamente, he de aceptar que ¡me encantan! (por si estas Navidades os surge la oportunidad, para que retoméis los juegos de mesa, ¡son geniales!)

Y para terminar el post de hoy, un consejo. Olvidaos de regalos, de comidas, de adornos… centraos en lo importante. La Navidad puede ser muy bonita o muy triste. Puede ser muy profunda o muy superficial. Recordad lo que de verdad merece la pena. Qué más da pasar los días en el hospital, si los pasamos juntos. Disfrutad de estos días, disfrutadlos de verdad.






¡FELIZ NAVIDAD!

No hay comentarios:

Publicar un comentario